Las sardinas son un plato muy típico y fácil de cocinar, hay muchas maneras pero sino tenéis mucho tiempo y no queréis complicados hacedlas al horno que se hacen solas y quedan más que buenas!
Para el acompañamiento os propongo un salteado de verduras cortadas muy pequeñas a cuadraditos, con un toque de orégano y bien pochadas, para mi son la combinación perfecta y si a todo eso le sumas un toque de paré de aceitunas… tienes todo el plato al completo!
Ingredientes: (para dos personas)
12 sardinas limpias y sin cabeza
ajo y perejil picado
1/2 calabacín
1/2 berenjena pequeña
1/2 zanahoria
1/2 pimiento verde
1/2 cebolla
1 cucharadita de orégano
una pizca de pimienta negra molida
aceite y sal
Precalentamos el horno a 180º
Disponemos aceite en una fuente para el horno y encima colocamos las sardinas, un toque de sal y esparcimos el ajo y perejil por encima de ellas, volvemos a verter un poco de aceite por encima y cuando el horno esté caliente las tendremos unos 25 minutos.
Mientras, cortamos todas las verduras muy pequeñas a cuadraditos y las vertemos en una paella con aceite a fuego medio bajo, dejando que se pechen y se unifique el sabor entre ellas, no os olvidéis de la sal. A mitad de cocción añadiremos el orégano y la pimienta.
Una vez tenemos las sardinas cocidas y la verdura en su punto nos disponemos a montar este plato.
Yo para la presentación he puesto la verdura en medio de las sardinas y en las sardinas no os olvidéis de una hoja de perejil fresco, al lado disponemos una cucharadita de paté de olivas.
Sencillo, rápido y muy sabroso!!!!