No se vosotros pero no ha pasado ni un mes de semana santa y ya hecho de menos el sabor de los buñuelos. Me encanta el toque de anís en ellos y en muchas ocasiones también se lo doy a mis bizcochos, me recuerdan a ellos y su sabor tan único.
Ayer pensaba en las ganas que tenía de comer un trozo de mi bizcocho de yogur con sabor a buñuelo, hoy, lo he preparado con muchas ganas de poder hincarle el diente pero mientras lo hacía pensaba en presentarlo de una manera divertida, así que se me ha ocurrido… en modo ajedrez, ¿llama la atención verdad? Es una manera muy bonita de presentar el bizcocho para una merienda con amigos, para después de comer con el café… Solo necesitáis chocolate en polvo y azúcar glas
Eso si!! un poco de precisión en los cortes y los tamaños! jejejeje
Ingredientes:
1 yogur natural (yo lo uso sin lactosa)
3 huevos
1 medida de yogur de aceite virgen extra suave
2 medidas de yogur de azúcar
3 medidas de yogur de harina para repostería
1 sobre de levadura royal
1 cucharada de anís en polvo
1 chorrito de anís (el licor)
1 chocrrito de vino dulce Moscatel (sino lo tenéis podéis eliminarlo sin problemas)
chocolate en polvo (puede ser cualquiera)
azúcar glas
Precalentamos el horno a 170º
Cogemos un bol y vertemos el yogur con los huevos, removemos con unas barillas.
Seguidamente echamos el azúcar, mezclamos bien y luego el aceite.
Ahora le toca al licor de anís y el Moscatel, mezclamos bien y vertemos el anís en polvo.
Vamos a por la harina y la levadura, sobretodo tenedlas antes tamizadas o
lo hacéis al momento pero así os aseguráis que no quedan grumos.
Con un molde redondo o cuadrado (como prefiráis) forramos la base con papel vegetal, vertemos la mezcla y horneamos unos 30 minutos. Pasado este tiempo asegurados que está cocido con un palillo, sino lo dejáis 5-10 minutos más, cada horno es un mundo.
Dejamos enfriar el bizcocho y vamos cortando con cuidado cuadraditos de unos 3x3cm, contamos 12 cuadrados y los ponemos en un plato, otros 12 en otro.
Los juntamos bien y a unos les tamizamos con un colador pequeño azúcar glas y con los otros el chocolate en polvo, ahora ya solo nos queda coger una bandeja y montar el ajedrez.
Que delicia es jugar a este ajedrez, alfil mata a la reina y me como tres!
Salteando ideas 